La televisión nos acompaña a lo largo de toda nuestra vida. Es ese amigo que todos tenemos, pero que no somos conscientes que lo compartimos. Nos informa, nos entretiene, nos hace llorar, reír, pasar el rato. En definitiva, otro más de la familia.
La televisión vivirá con nosotros momentos importantes «de la Historia con mayúscula y creará nuestra propia historia con minúscula». Hoy en día no se concibe la vida si no es con la televisión. De hecho, mas que de televisión podríamos hablar de la hegemonía del encuadre para el visionado de contenido audiovisual ya sea en cualquier tipo de plataforma (tablet, móvil, ordenador, etc). Pero de manera genérica podemos referirnos con la palabra “televisión”.
¿Y qué pasa cuando la televisión más que de amigo hace de enemigo?
Me gustaLe gusta a 1 persona